Autoridades: Sospechoso de Boulder “no mostró arrepentimiento”, ahora enfrenta 16 cargos de intento de asesinato

S: (Photo via: FBI) B: olice officers walk past a barricade adorned with flowers outside the Boulder County Courthouse on June 2, 2025 in Boulder, Colorado. A suspect is in custody after reportedly throwing incendiary devices at a group participating in an organized walk to show solidarity with hostages held by Hamas in Gaza. The suspect, an Egyptian citizen who had overstayed his visa, has been charged with a hate crime by the F.B.I. (Photo by Chet Strange/Getty Images)
S: (Photo via: FBI) B: Agentes de policía pasan junto a una barricada adornada con flores frente al Tribunal de Justicia del condado de Boulder el 2 de junio de 2025 en Colorado. (Photo by Chet Strange/Getty Images)S: (Photo via: FBI) B: Agentes de policía pasan junto a una barricada adornada con flores frente al Tribunal de Justicia del condado de Boulder el 2 de junio de 2025 en Colorado. (Photo by Chet Strange/Getty Images)

OAN Staff Abril Elfi 
Martes, 3 de junio de 2025

El sospechoso del ataque terrorista dirigido contra simpatizantes israelíes en Boulder, Colorado, enfrenta un cargo de crimen de odio, 16 cargos de intento de asesinato, además de dos cargos por uso de artefactos incendiarios y 16 cargos adicionales por intento de uso de artefactos incendiarios, informaron las autoridades.

El fiscal de distrito de Boulder, Michael Dougherty, señaló que, de ser declarado culpable, Mohamed Sabry Soliman, de 45 años de edad, podría enfrentar una sentencia de más de 600 años en prisión estatal.

Según reportes del New York Post, Soliman, ciudadano egipcio, expresó su apoyo a la Hermandad Musulmana, organización islamista sunita, a través de publicaciones en su cuenta de Facebook. El FBI confirmó posteriormente en un comunicado que Soliman se encontraba en Estados Unidos de manera ilegal, tras haber permanecido en el país más allá del vencimiento de su visa.

El fiscal federal interino para el estado de Colorado, J. Bishop Grewell, explicó que el acusado intentó comprar un arma de fuego para perpetrar el ataque, pero al no lograrlo, recurrió al uso de cócteles molotov.

“Nadie debería ser víctima de violencia, pero nuestras leyes reconocen que esta se vuelve especialmente grave cuando alguien es atacado por su raza, religión o país de origen”, declaró Grewell. “Soliman no mostró arrepentimiento y volvería a hacerlo otra vez.”

De acuerdo con los detalles contenidos en la orden de arresto, Soliman planeaba sacrificarse durante el ataque, aunque sobrevivió a sus propias acciones.

“Soliman mencionó varias veces que quería estar muerto”, en entrevistas con las autoridades.

“Dijo que tenía que hacerlo, que debía hacerlo y que no se lo perdonaría si no lo hacía”, según la orden judicial.

La orden judicial también señala que Soliman tenía la intención de lanzar más de dos cócteles molotov, pero desistió al asustarse, admitiendo que “nunca antes había lastimado a nadie”.

El ataque que está siendo tratado como un crimen de odio, iba dirigido contra un grupo de manifestantes proisraelíes que participaban en una marcha pidiendo la liberación de los rehenes israelíes en manos de Hamás.

Soliman comparecerá este jueves ante el tribunal, donde se le formularán formalmente los cargos.

Esta nota fue traducida por Patricia Mitchell de una versión en inglés.

Share this post!