
OAN Staff Abril Elfi and Brooke Mallory
Martes, 27 de mayo de 2025
El Secretario de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en inglés), Robert F. Kennedy Jr., y el Ministro de Salud argentino, Mario Lugones, anunciaron su intención de crear un “sistema de salud internacional alternativo” que rivalice con la Organización Mundial de la Salud (OMS, por sus siglas en inglés).
El martes, los líderes de la salud emitieron una declaración conjunta mientras ambos países, Estados Unidos y Argentina, se preparan para abandonar la alianza globalista de salud.
Durante el primer mandato de Donald Trump en 2020, Estados Unidos ya había anunciado su intención de retirarse de la OMS, criticando su gestión de la pandemia de COVID-19 y argumentando que también estaba demasiado influenciada por China. Esta decisión debía entrar en vigor en 2021, pero cuando el presidente demócrata Joe Biden asumió el cargo en enero de 2021, revirtió la retirada y Estados Unidos permaneció en la OMS.
Además, el presidente argentino Javier Milei, quien asumió el cargo a finales de 2023, ha expresado posturas libertarias y antiglobalistas, incluyendo críticas a organizaciones internacionales como la OMS, alineando su postura con la de Kennedy Jr.
Tanto Kennedy como Lugones criticaron duramente a la organización en una declaración conjunta, argumentando que había perdido la confianza de la opinión pública mundial y no había sido sincera en hechos cruciales, lo que ha tenido “consecuencias globales devastadoras”.
“La ausencia de reformas significativas, las exigencias financieras desproporcionadas y la creciente politización de la organización han llevado a Estados Unidos y Argentina a retirarse de la OMS”, declararon ambos. La retirada marca el inicio de un nuevo camino hacia la construcción de un modelo moderno de cooperación sanitaria mundial basado en la integridad científica, la transparencia, la soberanía y la rendición de cuentas.
Nuestro compromiso común es implementar intervenciones de salud pública rentables y basadas en la evidencia que prioricen la prevención, especialmente en la infancia, abordando las causas fundamentales, como las toxinas ambientales, las deficiencias nutricionales y las normas de seguridad alimentaria, afirmaron.
La declaración conjunta señaló que ambos países planean utilizar la ciencia de referencia para abordar urgentemente las amenazas reales para la salud, al tiempo que alientan a otros países a unirse también a su alianza.
“Bajo la presidencia de Donald J. Trump, Estados Unidos está restaurando un enfoque soberano y orientado a los resultados, priorizando a las personas por encima de la política”, afirmaron. “Argentina, asimismo, apoya sistemas de salud pública basados en la autonomía, la transparencia, la innovación y el rigor científico. Ya no podemos apoyar un sistema que no protege a nuestra población ni cumple con su mandato.
“Estados Unidos y Argentina invitan a todas las naciones comprometidas con la integridad científica, la transparencia y la defensa de la dignidad humana a unirse a nosotros para forjar una nueva era de cooperación sanitaria mundial”, añadieron.
Para el bienio 2024-2025, se proyectaba que Estados Unidos aportaría aproximadamente 706 millones de dólares a la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los cuales 264 millones corresponden a contribuciones señaladas y 442 millones a contribuciones voluntarias. Esta financiación convirtió a Estados Unidos en el mayor contribuyente individual a la OMS, representando aproximadamente el 10 % de su presupuesto total.
Esta nota fue traducida al español por Eduardo Flores de una versión en inglés.